El recibidor es lo primero que, tanto tú como tus invitados, veis al entrar en casa. Por lo tanto, su aspecto es capaz de enamorar a primera vista. Este pequeño espacio puede marcar la diferencia, ya que dice mucho más de las personas que habitan la casa de lo que pensamos. En algunas ocasiones, pueden llegar a reflejar la personalidad y el estilo decorativo de la casa sin apenas haber puesto un pie dentro de ella.

Es por ello que una entrada bien ordenada no solo garantiza practicidad y funcionalidad, sino que también proporciona bienvenidas y despedidas mucho más agradables y acogedoras. Y Marie Kondo, lo sabe. La gurú del orden -famosa por su infalible método KonMari– quiere ayudarte a ofrecer a tus invitados el recibimiento que merecen. Por eso, cuenta con cuatro trucos infalibles para sacarle todo el partido a este espacio y mantenerlo siempre organizado.

1. Define un sitio para ordenar cada cosa

Recibidor decorado con cómoda Helvine, Candelabro Mistra, Lámpara de mesa Monze Creditos: Kave Home

Quizás tienes la sensación de que el recibidor es un espacio demasiado pequeño de la casa como para tenerlo en cuenta. Pero este es el principal error. Aunque sus dimensiones no sean las más destacables, como decíamos y bien apunta Marie Kondo, es el primer espacio que uno percibe al entrar y el último al salir. Y, por lo tanto, se convierte en uno de los más útiles.

Dejar las llaves, sacarse los zapatos para ponerse las zapatillas o descolgar la chaqueta para salir por la puerta. Todos esos pequeños gestos, que forman parte inconsciente de nuestro día a día, se convierten en algo más fácil si se consigue un orden lógico y funcional para realizarlos.

La solución del método KonMari se basa en el almacenamiento inteligente, y en saber darle un lugar a todo. ¿Por ejemplo? Desde colocar unas prácticas bandejas para dejar las llaves y vaciarse los bolsillos, a una cesta o un banco junto al zapatero y el perchero, para quitarse los zapatos y colgar los abrigos.

De esta forma, se crea un balance perfecto entre la funcionalidad que tiene el espacio y la decoración del ambiente. ¿Y para el teléfono móvil? La icónica caja de Faraday de Stolp® x Marie Kondo. La solución perfecta para desconectar del mundo digital, por un ratito, al llegar a casa (por cierto, aquí te contamos que más necesita tener en el resto de la casa una persona ordenada).

2. Adapta el recibidor al tipo de familia

La entrada es un sitio de todos y para todos. Incluso para los invitados. Así que hay que tener en cuenta la distribución del espacio y los elementos necesarios para satisfacer las necesidades de quienes van a usarlo. Es por eso que hay que saber adaptarse a las características y peculiaridades de cada casa.

Si vives solo, esta tarea es más fácil, ya que puedes guiarte por tus gustos y necesidades propias. Pero, en el caso de las familias con niños pequeños, por ejemplo, Marie Kondo nos invita a elegir muebles de tamaños reducidos que se adapten a su altura. O bien cajones organizados y diferenciados con etiquetas para que sepan dónde guardar sus cosas y no las olviden al salir con prisas de casa.

Banco Zaide de madera maciza de roble con acabado natural asiento de cuerda Creditos: Kave Home

Sea como sea, algo que no puede faltar en un recibidor es un pequeño banco o taburete para que, tanto invitados como habitantes, tengan un lugar cómodo para descalzarse. Al igual que un espejo para hacerse un último repaso antes de salir por la puerta.

3. Varía los accesorios en función de la estación

Marie Kondo también nos recuerda que cada estación del año tiene unas condiciones climatológicas específicas. Y que es algo que no hay que pasar por alto a la hora de organizar tu recibidor. Al ser la puerta de entrada a la casa, es una de las zonas -junto con la terraza- que más sufre los cambios climáticos.

Hay que tener en cuenta que en las épocas más lluviosas llegamos a casa con los zapatos más sucios o con la chaqueta y el paraguas goteando agua. Es por eso que es imprescindible escoger un buen felpudo para cada una de las puertas exteriores. Porque, aunque en la época otoñal o invernal su funcionalidad se pueda ver con más claridad, incluso en verano tiene su utilidad, evitando ensuciar a cualquier coste.

Además, para acabar de completar la estancia y no pasar por alto ningún detalle, incluir un paragüero en tu recibidor será la guinda del pastel. Te evitará mojar zonas de uso diario y visualmente quedará todo más recogido. Otra vez, balance perfecto entre funcionalidad, decoración y organización.

4. Crea una atmósfera cálida y relajada

Lámpara de mesa Tay de cerámica verde y lino beige Creditos: Kave Home

Por último, dejando ahora de lado la parte más funcional que tiene el recibidor, no hay que olvidar su parte más sensorial. La entrada de la casa se puede convertir en una bienvenida o en una despedida, y estas tienen que estar envueltas del ambiente propicio.

Darle un toque de luz o de color aportará calidez y serenidad, creando así una atmósfera acogedora, que invitara a entrar o a salir con una actitud de calma y relajación. Para ello, siguiendo la filosofía de Marie Kondo, puedes agregar una lámpara de luz cálida en el mueble recibidor o una vela aromática que marque la esencia del hogar. Dos opciones perfectas para amantes del orden, que te ayudarán a crear este ambiente bucólico y acogedor, que uno siempre busca al entrar en casa.

Periodista especializada en estilo de vida y viajes, con experiencia en TV3, Tinkle y National Geographic España, donde actualmente también colabora.

Leave a comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *